Vic es una ciudad con un rico patrimonio arquitectónico y cultural, que conserva su esencia medieval y su tradición gastronómica. En este artículo te contamos qué ver y qué hacer en Vic, una ciudad que te sorprenderá por su belleza y su ambiente.

La Plaza Mayor
La Plaza Mayor o Plaza Mercadal es el corazón de Vic y el lugar donde se celebran los eventos más importantes de la ciudad. Se trata de una plaza porticada, rodeada de edificios de diferentes épocas y estilos, que tiene la particularidad de no estar asfaltada ni empedrada. Cada martes y sábado se celebra el mercado, una tradición que se remonta al siglo IX y que atrae a miles de visitantes. En la plaza también se puede admirar la escultura del Merma, un personaje típico de las fiestas populares de Vic, y el Ayuntamiento, que ocupa un edificio del siglo XIV.

La Catedral
La Catedral de San Pedro es el monumento más emblemático de Vic y uno de los mejores ejemplos de arte románico en Cataluña. Fue construida por el obispo Abad Oliba en el siglo XI, aunque sufrió varias reformas posteriores. De la época románica se conservan la cripta, los restos de la iglesia de Santa María y el campanario. En el interior de la catedral se puede visitar el Museo Episcopal, que alberga una de las colecciones de arte medieval más importantes de Europa.

El Museo Episcopal de Vic
El Museo Episcopal de Vic es uno de los museos más relevantes de Cataluña y de Europa en cuanto a arte medieval se refiere. Alberga una colección de más de 29.000 piezas, entre las que destacan las pinturas y esculturas románicas y góticas, procedentes de iglesias y monasterios de la comarca de Osona y de otras zonas de Cataluña.

El barrio de los curtidores
El barrio de los curtidores es uno de los más antiguos y pintorescos de Vic. Se encuentra junto al río Mèder y se caracteriza por sus casas de piedra y madera, que antiguamente albergaban los talleres de los curtidores de pieles. El barrio conserva el trazado medieval y algunos elementos como las pilas de curtir, los canales de agua y los puentes. Es un lugar ideal para pasear y disfrutar del ambiente histórico de la ciudad.

El Museo del Arte de la Piel
El Museo del Arte de la Piel es un museo único en el mundo, dedicado a la historia y la técnica de la curtiduría y el arte de la piel. El museo se encuentra en el antiguo convento del Carmen, un edificio del siglo XVII que se ha restaurado y adaptado para albergar las salas de exposición. El museo muestra el proceso de transformación de la piel desde el animal hasta el producto final, así como las diferentes aplicaciones artísticas y decorativas de la piel a lo largo de la historia y de las culturas.

El Museo de San Antonio María Claret
El Museo de San Antonio María Claret es un museo dedicado a la vida y la obra del santo fundador de los Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María, nacido en Sallent en 1807. El museo exhibe objetos personales, documentos, fotografías y reliquias del santo, así como una reproducción de su habitación y de su capilla.

El Museo Balmes
El Museo Balmes es un museo dedicado a la figura del filósofo y político catalán Jaime Balmes, nacido en Vic en 1810. El museo se sitúa en la casa donde nació y vivió el pensador, que se ha conservado con el mobiliario y los objetos originales. El museo ofrece un recorrido por la vida y la obra de Balmes, así como por el contexto histórico, social y cultural de su época. El museo también dispone de una sala de exposiciones temporales y de un centro de documentación.

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